Solo queda el gesto
de la paloma emprendiendo el vuelo,
del chistido del agua sobre la candela
o la sonrisa guardada de la mujer que amaste.
Quedan en los sueños agujeros,
ceniza en la memoria
y paseos demasiado tarde.
Yo creo que no por sastre
teje la muerte nuestro sendero
ni que la vida cobre sentido
si no siguiéramos los impulsos.
Verde, amarillo, gris…
qué importa el color de la duda humana
si, al final, solo queda el gesto.
Nítsuga Sotso Anibor © Todos los derechos reservados
¿Son los recuerdos un simple gesto?
ResponderEliminar¿Quedan las vivencias comprimidas en tan sólo uno de ellos?
Desde el principio sabemos el final, durante el recorrido tomamos instantáneas, quizás por llevarnos algo más que el alma.
Besos
Gran poema sí señor, buena elección, compañero del alma, compañero.
ResponderEliminarMordisquitos desde Cáceres, loco
Excelente
ResponderEliminarSólo queda el gesto y cómo nos agarramos a él a veces.
ResponderEliminarMuy bueno.
Saludos
Con un simple gesto mira lo que puedes llegar a emocionar...
ResponderEliminarBesos.
Sisi, la vida son pequeñas piezas que todas juntas le dan más color al arcoiris del sentido
ResponderEliminarHostia, hostia. Me siento como si me hubieran dado un bofetón. ¿Será así? Lo peor de todo es que me da la sensación que hago un esfuerzo de autoengaño para no creerlo. Un esfuerzo diario.
ResponderEliminarIntensísimo y magnífico el poema. El gesto, la palabra y hasta lo bello. La idea también.
El tema de tiempo me sacude, como la sonrisa guardada de la mujer amada y esos paseos. Demasiado tarde.
Chapeau!!!
Gestos que encierran grandes respuestas
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