El hombre siempre ha sido atraído por el mar, pero es un escenario antinatural para nosotros, un lugar de gran peligro: mareas, corrientes, olas, viento… cada uno presenta sus propios riesgos y ninguno de los cuales pueden ser ignorados. El menor error del juicio puede ser un error que nunca podría recuperarse. Pero un buen marinero no lucha frente a estos elementos; un buen marinero trabaja con ellos utilizándolos a su favor mientras que otros, menos afortunados, podrían estar siempre a la deriva. Pero, si evita la furia poseidónica, siempre vuelve a la seguridad del hogar.
Dexter
Después de la tempestad viene la calma... si los peligros no son enfrentados, sacando lo mejor de ellos (utilizándolos a nuestro favor)la calma no será saboreada cómo merece.
ResponderEliminarNo he pensado lo que he vomitado pero ahí lo dejo.
Saludos
En realidad prefiero que no vomites porque hoy salí sin paraguas pero, en cambio, te agradezco tu opinión acerca de lo que dice este asesino mata asesinos.
ResponderEliminarUn saludo!
"Vas a la deriva", le dice un árabe a Lawrence... Yo soy de esos.
ResponderEliminarNo me lo puedo creer. El Atlantic City justo cuando ayer estuve en youtube mirando y escuchando canciones del Nebraska, cosa que hacía millones de años que no hacía.
State Trooper, qué pasada y además he insertado una versión de unos tíos raros en el blog.
¿Telepatía? Ja, ja.
Un saludo.
Demasiadas variables y desconocimiento de lo que ocurrió, ocurre y ocurrirá a nuestro alrededor. ¿Inseguridad? Vivo en ella. ¿Escepticismo? Duermo con él. Tan solo música, cine, literaturas y blogs palian tales males.
ResponderEliminarUn saludo