Uno de los vídeos que más me ha impresionado es el que hoy os traigo. Se trata de la proeza de William Trubridge: el primer humano en lograr descender 100 metros (un hectómetro) en el mar sin asistencia de ningún tipo, es decir, a pulmón.
Tiene lugar en un sitio paradisíaco: Dean's Blue Hole, Long Island, Bahamas. Sin embargo, cuando va descenciendo y la luz del sol empieza a ser engullida por la soledad del oceáno, a uno se le encoge el corazón.
¿La música? Un acierto.
Todos nacemos con algún don, el de algunos respirar sin más que eso, y el de otros dejar de hacerlo y no morir en el intento. Que envidia.
ResponderEliminarHola! Genial vídeo, impresionante proeza.
ResponderEliminarFelicidades por tu blog :)
Patri